MANTENIMIENTO DE FRENOS

• La fricción asociada con el frenado provoca una generación de calor significativa.
• El material de la almohadilla más suave que los discos se desgastará más rápido.

Las pastillas gastadas pueden dañar el disco de freno.

Recomendaciones de mantenimiento:

Controle el estado de sus plaquetas (aproximadamente cada 10.000 km).

Reemplazar cuando el grosor se reduzca a 2 mm.

Al frenar, están muy demandados. Su desgaste puede provocar vibraciones. La máxima eficacia de frenado depende de su estado.

Recomendaciones de mantenimiento:

Solicita una revisión de los discos cada vez que se cambien las pastillas, para comprobar que su espesor respeta la dimensión establecida por el Fabricante.

Menos demandados ​que las almohadillas, sin embargo, sufren las mismas limitaciones.

Recomendaciones de mantenimiento:

Revisa los tambores de freno con regularidad (aproximadamente cada 20.000 km). Los segmentos deben reemplazarse tan pronto como el grosor de los revestimientos sea inferior a 1,5 mm.

• El uso excesivo de líquido no solo puede causar una pérdida de la eficiencia de frenado, sino que una fuga del sistema hidráulico también puede convertirse en una fuente potencial de falla. Una luz de advertencia en el panel de instrumentos te permite conocer su nivel de advertencia.
• En caso de una caída anormal del nivel del líquido de frenos, consulta inmediatamente a tu experto PEUGEOT.

Recomendaciones de mantenimiento:

Realiza el cambio del líquido de frenos al menos una vez cada 2 años o cada 40.000 km o 60.000 km, según la fecha de la primera puesta en servicio de tu vehículo. Esto es esencial.